Nuevo trabajo desde la Sudamérica
más reivindicativa, de unos viejos conocidos en el sello, Hermanxs De La Mente Furiosa. Esta vez, compartido con sus
compatriotas Los Ingobernables. Comenzaremos
el texto por la cara A y con la banda
oriunda del Sur de Buenos Aires, específicamente establecida o a caballo, entre
las ciudades de Quilmes y Berazategui, es decir Los Ingobernables. Un grupo de hardcore
punk, con una potencia bestial tanto instrumental, vocal y mensaje aplastante
desde una postura social, militante y activista. Que ha dejado huella en la
escena hardcore argentina durante más
de una década, desde que se formara allá por el año 2006; a raíz, de la confluencia
de distintos músicos, procedentes de la longeva y emblemática banda de los 90, Eterna Inocencia o ex miembros de Animo y Backside. Comentar que la música skate punk y el hardcore
melódico, pero eso sí, sin restarle un ápice de virulencia sonora. Están
muy presentes en Los Ingobernables,
la clara influencia de sus predecesores Eterna
Inocencia. Y como no podía ser de otra manera, en una banda que entiende la
música y el arte, como un concepto de rebelión y arma política de lucha
constante contra el poder opresor y a favor de causas sociales justas. Sus referentes
imprescindibles son formaciones como Minor
Threat, Black Flag o Bad Religion. El primer disco que
publicó la banda Los Ingobernables
fue el interesante “Cuando el hardcore llama” (2009). Tras un largo tiempo de
espera, le siguió el logrado trabajo en vivo “Sin tregua ni pacto” (2016).
Y por fin, sobre 2016 confluyen con la banda Hermanxs De La Mente Furiosa, para dar forma al split o compartido que nos ocupa.
Precisamente, el line up de la formación
lo integraron: Manu a la batería; Ale al bajo; Ciri y Edu a las
guitarras; mientras Guille y Panal
aportaron las voces. Los temas con los que participan en el split, se grabaron entre abril y agosto
de ese mismo año, de manos de Roy Ota
en La Nave de Oseberg y Estudios del Sol Naciente.
La cara A, abre con el tema de Los Ingobernables, “Moto de bolsillo”. Un tema hardcore
punk a dos voces, con claro y contundente mensaje, por un lado contra la
brutalidad policial, bastante generalizada a nivel global en el mundo post
industrial, pero enfáticamente ligada a la represión por parte de estados
sudamericanos, que en una inmensa mayoría son herederos de dictaduras no menos
severas. Por otro lado, atiza a aquellos obreros que por inacción o simplemente
alienación, terminan siendo serviles a los efectos negativos de la propia
producción en cadena, de las cual ellos mismos son partícipes directos. Sin
ningún atisbo de rebelión o simplemente, reivindicación de los derechos más
fundamentales, puesto que los mismos han sido abolidos y sustituidos por
divertimentos u ocios más banales, como ahogar la frustración en alcohol. Y si
no eres dócil como el resto del redil, ya sabes que te toca probar la porra o
algo peor del siervo fiel y también alienado de su señor el poder.
El siguiente tema lleva por
título “En el mismo lugar”. Y aunque su temática al igual que su contundente
predecesora en los surcos del vinilo que nos ocupa, contiene un mensaje
similar, en cambio comienza la letra con referencias a los programas de televisión
argentina, muy populares, sobre todo en la década de los ‘90, Showmatch y Videomatch. Y es que lo que en principio, fueron retransmisiones
deportivas, derivaron hacia sketch de
humor muy básico o socarrón y cámaras ocultas. En una línea muy disparatada
entre lo que se conoció en España como Humor
amarillo o Al ataque. Y que
quizás este tipo de humor, si se les va de las manos a los guionistas,
productora o presentadores, pueda derivar de lo entrañablemente freak a lo grotescamente humillante. Y
quizás, por ahí van los tiros, mucho underground
y deporte extremo, pero en el fondo, lo que crea más expectación y audiencia,
son las miserias ajenas. Y más cuando hablamos de mass medias. Y los verdaderos problemas sociales y culturales, no
salen a la luz, pero siguen causando estragos y estupor entre los más
combativos. Mientras, al burgués medio no sólo le afecta, sino que en un
momento dado puede incluso incentivarlos.
El tema que cierra la cara A, se
trata de “Hosoi” y está dedicado al controvertido skater californiano Christian
Hosoi, que de estatus de leyenda e ídolo de masas, terminó teniendo
problemas con las drogas e incluso tuvo que ingresar en prisión. A bastantes fans no les convenció, que de buenas a
primeras se volviera cristiano y pastor. Y la verdad, fuera una opción personal
voluntaria o tal vez, la necesidad de salir de la cárcel por buena conducta y
supuesta moral reeducada, es lo que a muchos antiguos admiradores no les
termina de cuadrar del todo. Y de ahí, de nuevo esta ácida respuesta en forma
de canción rápida hardcore. Mucho
ego, mucha historia, pero en el fondo Hosoi
no era más que una persona vulnerable y vacía, maleable, sin pretensiones
políticas y menos aún, posicionamiento en contra de la autoridad opresora, más
o menos neoliberal. Que es como gusta al poder opresor. Al revés, terminó
siendo un juguete roto del sistema, precisamente, por no saber llenar su vida,
a pesar de la fama y las cantidades millonarias, gracias a sponsors y empresas en las que invirtió y que luego en su declive y
descenso a los infiernos, lapidaría.
La cara o lado B, está conformada
por temas en una línea muy similar y afín, en lo que a lucha crítica y social
se refiere, por parte de Hermanxs De La
Mente Furiosa. Una banda hardcore,
que ya con anterioridad, tuvimos el placer de acoger en el sello Collector’s Series DIY (EP “Marichiweu” referencia CS-08, abril
2011), como coeditores, junto a decenas de sellos y distribuidoras amigas, en
su inmensa mayoría sudamericanas. Hermanxs
De La Mente Furiosa, comenzó su periplo como banda, sobre 2007, en Monte
Grande, provincia de Buenos Aires. La intención desde la propia concepción de
la banda fue transmitir pensamientos o sentimientos que fueran más allá de lo
estrictamente político o social, incluso abarcando parámetros de reivindicación
de derechos nativos y la propia cultura y legado indígenas, como así lo
reflejaban los textos traducidos a la lengua mapuche de precisamente el EP “Marichiweu” (“Diez veces
venceremos”). Un pueblo ancestral que vio como el imperialismo extranjero le
arrebató sus tierras y luego gobiernos, tras otros, como los de la dictadura
militar, promulgaron leyes para empeorar el agravio. Además, tienen muy claro
los conceptos de autogestión, ayuda mutua o anticomercialidad. En donde, si hay
un beneficio económico, se revierte precisamente, para seguir creando proyectos
que tengan una dimensión a nivel de concienciación mucho mayor y los
espectáculos en vivo se conviertan en algo más que un simple show de rock. Bajo estos parámetros idealistas y muy válidos, antecedentes
conocidos, tanto a nivel distro, como por ejemplo su debut “Armonizando la rabia”,
la cara B se nos presenta apasionante. Antes de pasar a comentar los temas,
habría que recordar la formación de HDLMF que grabó este trabajo: Cristian Roma (voz y gritos), Gabriel Camera “Lolo” (bajista), Federico Lombardi (guitarra y coros) y Cristian Molina (batería).
El primer tema lleva por título “Corporación
esperma: la venganza”. Letra llena de rabia y crudeza contra la
dogmatización del rock, del punk ¿y por qué no?, del sexo. Y es que
lleva implícita una dedicatoria a los colectivos y organizaciones trans que luchan por la erradicación de
barreras ideológicas o de cualquier tipo, que puedan perjudicar de forma insana
o desvirtúen la propia naturaleza, psique o esencia de las personas que se
diferencian de los roles convencionales. Un tema desgarrador, pero necesario,
porque delante de la vara del opresor, siempre hay un objetivo sensible de ser
marginado o vejado. Y contra eso, hay que luchar y despertar conciencias. Bravo
por HDLMF en ese sentido.
Hablando de dogmatización,
precisamente el siguiente tema de título bastante clarificador: “No
dejes que la música se convierta en una religión”. Nos viene a recordar
que en ciertos ambientes, ellos se refieren al hardcore, pero en otros países y escenas, también se está dando en
otros estilos, que aunque históricamente fueran estilos preferentemente
contraculturales o subversivos, hay bandas ambiguas y otras que definitivamente
se alinean en el lado más tétrico y oscuro, pero no desde un punto de vista
preternatural, sino más bien, de ideas intolerantes más afines a ideologías
xenófobas y homófobas como las fascistas. Y es precisamente, en este punto, en
donde agrupaciones como HDLMF, se
terminan posicionando. Siendo muy digno de alabanza y reflexión por todos los
colectivos DIY y undeground en general. Porque debido al fenómeno, anteriormente
expuesto, al final terminan obligando a los artistas más activista y combativos,
a dar un paso al frente. Quizás, entremezclado por la indignación y un poso de reafirmación
y orgullo. Curiosamente, con la distro Efeito
Colateral de Brasil, nació un proyecto conjunto con Collector’s Series DIY (Punk Contra O Fascismo, bandas del estado
español y Brasil, en base a este mismo planteamiento. Y es que el punk al igual que el hardcore, siempre estarán en contra de
cualquier tipo de opresión, fascismo e ideas autoritarias que intenten anular
al ser humano y degradarlo a distintos niveles.
La canción que cierra el disco
lleva por título “Aztarna”. Que podríamos traducir del euskera al castellano
como “vestigio” o “rastro”, según el contexto y el propio desarrollo del tema,
muy autocrítico, en el sentido de actuar más y hablar menos o como ellos
refieren en el propio insert, “mejor
que decir es hacer” u otro verso esclarecedor en este sentido “Perdemos tiempo intentando ser un rastro
más”. Y es que sea en un plano ideológico o creativo, se tiende muchas
veces a criticar por criticar, sin que este juicio sea precisamente positivo. El
pensamiento y comportamiento zafio en muchas llamémosle cortésmente “personas”,
les lleva a enjuiciar por vicio, sin ningún argumento probable; pero, quizás en
los confines más recónditos del ser humano, se encuentran estas características
menos edificantes. Y si en los planos más comunes de la vida, se dan estas
desviaciones de la razón, en favor de la estupidez, la envidia o simplemente el
indecoroso despropósito de despotricar y con la finalidad principal de hacer
daño gratuitamente. Ya no digamos, cuando estos mismos demenciales gestos son
trasladados a esferas sociales o políticas. Aquí ya entraríamos en los dimes y
diretes clásicos y eternos, de así nos va, el "cuñaismo", el obrero
de derechas, etcétera, etcétera, etcétera. A propósito de este tema, se me
viene una anécdota a la memoria, en las muchas conversaciones por chat o comunicaciones por correos
electrónicos, con el vocalista Cristian
Roma, cuando hemos intercambiado opiniones o simplemente hemos tratado de
coordinarnos y organizarnos, cuando ha habido oportunidad de esta confluencia,
para proyectos como el que nos ocupa. Le interesaba mucho la etimología del
euskera. Y me preguntaba por el origen o significado de la palabra vasca “Aztarna” y si la memoria no me falla,
fue mucho antes de grabar el disco, con lo cual tendría en mente desarrollar un
tema bajo el concepto de dejar huella o rastro, por aquel entonces. Cuando lo ví
plasmado en el EP compartido junto a Los Ingobernables, me recordó al
instante esta simpática anécdota. Y es cierto, que hay que canciones o temas,
que entre la composición, arreglo o desarrollo de la letra en sí, pueden
transcurrir años, antes de que se plasme por fin incluso en un local de ensayo.
Ya no digamos, incorporarla a un trabajo concreto, junto a otros temas que
pudieran o no tener algún nexo, ya fuera conceptual o simplemente desde un
punto de vista creativo o estético.
Y hablando de estética, el
diseño, como hasta ahora lo que he conocido, al menos por parte de HDLMF, me parece genial. Con una cita
en el reverso del cover art o
contraportada, de nada más y nada menos que del pensador anarquista Errico Malatesta: “Sustituir el odio por el amor, la competencia por la solidaridad, la
búsqueda exclusiva del propio bienestar por la cooperación fraternal para el
bienestar de todos”. Ya nos anticipa de antemano, la implicación de las
personas, a distintos niveles, que una vez más han hecho posible, los que otros
se empeñan en hacer imposible. Repo
Bandini fue el encargado del diseño, la serigrafía del arte corrió a cargo
de Pablo “Tatán” Barbera. Y como
bien reza, la dedicatoria final de los grupos hacia los sellos, colectivos y
personas que aportaron su granito de arena al proyecto. Confirmo y me atrevo a
asegurar que la energía e impronta nos invade profundamente y procurará fuerzas
renovadas, además de seguir inspirándonos nuevas aventuras discográficas.
Entre los sellos y colectivos que
participaron, se encuentran: Crecer
Records (Uruguay), Les Nains Aussi
RDS (Francia), Los Pájaros Records
(Argentina), Revolution Discos
(Argentina), Mala Idea Discos
(Chile), Nuestra Lengua (USA), Familia Raíces (Argentina) y unos
servidores, Collector’s Series DIY Recs
(España).
Enlaces relacionados:
Bandcamp de Los Ingobernables https://losingobernableshc.bandcamp.com
Bandcamp de HDLMF
https://hermanxsdelamentefuriosa.bandcamp.com
Repo Bandini (diseño) http://www.inpanoptikon.com.ar
Pablo “Tatán” Barbera (serigrafía) https://www.facebook.com/raices.cloth
Sellos y colectivos
participantes:
Crecer Records
(Uruguay) http://crecerrecords.bandcamp.com
Les Nains Aussi RDS
(Francia) stillangry@no-log.org
Los Pájaros Records
(Argentina) https://www.facebook.com/luca.marcelino.96
Revolution Discos
(Argentina) https://revolutiondiscos.bandcamp.com
Mala Idea Discos
(Chile) malaideadiscos@gmail.com
Nuestra Lengua
(USA) nuestralenguarecords@yahoo.com
Collector’s Series
DIY Recs (España) http://collectorseriesdiy.blogspot.com
Texto: Ferri (La Factoría del Ritmo)
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