Recibimiento brutal a QOTSA y BALA en el impresionante marco del Marenostrum de Fuengirola, como premonitoria antesala a la mágica y enigmática noche de San Juan. 23 junio 2024.

 

Caluroso y mágico encuentro en la noche de San Juan, en un marco inmejorable. El Castillo de Sohail, coronado por la 'luna fresa'; aunque, las tonalidades; más bien, parecían entre anaranjadas y rojo fuego. Quizás propiciado por el 'feliz contagio', del fragor de las descargas y sinergias que allí se darían cita a lo largo de la jornada. Mientras, esperábamos en la caseta habilitada por la organización, las últimas instrucciones los integrantes de los medios desplazados, se confirmó a escasos minutos de comenzar el espectáculo, el 'sold out'. Entre la fabulosa acogida por parte del respetable allí presente y artistas, que como suele ser habitual, quedaron encandilados, ante un marco tan especial, a orillas del 'Mare Nostrum', Denominación, Marenostrum, adoptada por la organización de estos fantásticos festivales, conciertos y diversos eventos culturales masivos estivales, que tienen lugar desde hace unos años, en la zona limítrofe de Fuengirola con la costa mijeña, en la siempre cosmopolita e intercultural Costa del Sol. La confluencia catártica de antiguas lides rockeras, que aún resonaban como potentes ecos sobre los muros del castillo y noche mágica, día marcado a rojo en el calendario, por la celebración del evento y del siempre bienvenido solsticio de verano. Hacían más propicio aún, la relevancia histórica de las descargas, que estamos seguras, serán recordadas con especial cariño por todos los allí presentes, de por vida. 

Bala es una banda que está tocada por la varita mágica y lo ha demostrado, derrochando su talento en grandes festivales de España, Portugal, Japón, Australia, USA, Colombia o Reino Unido, dejando huella en eventos tan emblemáticos como el Stoned and Dusted (Desert Generator), festival que se llevaba celebrando en el desierto de Mojave de California. Su reconocimiento internacional y estado de gracia, son un aval honesto del gran presente y esperemos, futuro, les espera a estas dos grandes artistas galegas, que conforman el line-up base y principal de la banda.

El evento lo abrió contundentemente el power dúo galego Bala, con el temazo 'Equivocarme', al igual que abre su estupendo y maduro último trabajo 'Besta' (2024). La banda cada día más afianzada, como una de las máximas exponentes del rock más enérgico del estado en la actualidad. Una agrupación que bebe de diversas y eclécticas fuentes, que van desde el Grunge, al Stoner, sin dejar la fiereza del Punk, el Metal y el Hardcore. Tanto es así, que hubo momentos que tal y como descargaron, me llegaron a recordar recursos estilísticos y actitudes más propias del movimiento 'Crustie' y D-beat. Y es que el dúo formado por la cantante y guitarrista Anxela Baltar 'Anx' y la batería Violeta Mosquera 'V', emanan pura energía sonora y mensajes contundentes en sus letras reivindicativas, que parecen irradiar ellas mismas desde lo más profundo y visceral de sus entrañas. Realmente, practican un rock contundente y enérgico sin cuartel, ruidosa propuesta poética sin parangón y que gracias a su furiosa y atrevida propuesta, rebasa cualquier posible comparación ecléctica o no, en el mundo de la música más alternativa.

 

 

Y ya que citamos antes a las entrañas, el tema que seguiría, 'Tripas / Chained', correspondería a su primer trabajo de larga duración 'Human flesh' (2015) y aunque nos hacen saber que tan sólo tendrán treinta minutos, para presentar su bloque de canciones, igualmente nos hacen llegar la emoción afectuosa y enorme agradecimiento, que sienten por ver el recibimiento tan caluroso de todo el recinto. Volviendo a su último lanzamiento, también caerían grandes temas como 'Prisas' o 'Inmutable'. Entre medias, tocarían uno de nuestros temas preferidos, 'Bessie', por su mensaje de lucha y superación, en tiempos tan convulsos, que parecen no haber cambiado, por desgracia; para una mujer negra y motera, que rompió cualquier estereotipo y normas convencionales. El que dedicaron a Bessie Stringfield, que logró la hazaña de desafiar a la 'América' más retrógrada, profunda y racista de los años '30, del pasado siglo; cruzándola, con su máquina de libertad sobre ruedas. Llegando al final de su actuación, tenían reservada una sorpresa, y es que contaron con la colaboración especial de la bajista de Nasvhille Pussy, Bonnie Buitrago. Con la que se marcarían un soberbio homenaje a Nirvana, a través de la versión de la banda de Aberdeen, 'Territorial pissings', perteneciente a su icónico álbum 'Nevermind' (1991). Siguiendo con un repaso a su anterior trabajo 'Maleza' (2021), donde sonaron a golpe de batería y potentes riffs de guitarra, dejando ya para el final, 'Hoy No', 'X' y 'Agitar'. Despidiéndose, del público allí presente, que no cejó en su empeño de animarlas y disfrutar del atronador despliegue, que derrochan Bala.

 

Sobre las 21:30 comenzaría Queens of the Stone Age, cuyos integrantes, saltaron al escenario igualmente enérgicos y también muy motivados, por la calurosa acogida del público. Basarían su repertorio fundamentalmente en álbumes como: 'Lullabies to Paralyze' (2005), '...Like Clockwork' (2013), el exitoso tercer trabajo en estudio 'Songs For The Deaf'' (2002) y por supuesto, su última publicación discográfica hasta el momento, también gozó de un notable protagonismo, 'In Times New Roman...' (2023). Los precedió la épica fanfarria de entrada 'The Orgy', compuesta en su día por el magnífico compositor de origen griego, Basil Poledouris, para la legendaria película de culto basada en 'Conan El Bárbaro' de Robert E. Howard. Para cuando ya nos quisimos dar cuenta y tras unos efectos de luces espectaculares que se irían sincronizando a modo de danza y ritmos armonizados, durante toda la velada, ya estaban tocando y contagiando con sus peculiares bailes y puesta en escena, con temas como 'Little Sister' o 'Smooth Sailing'. Les seguiría, 'Paper Machete' extraído de su último disco 'In Times New Roman...', conocido como el tercero de la trilogía del sello indie Matador Records. Entre el groove que implementa a la perfección Mikey Shoes y la precisa potencia a los tambores de Jon Theodore, sentaron las bases perfectas para arropar las melodías a las guitarras de sus compañeros Troy Van Leeuwen y Josh Homme, teniendo también que resaltar las armonías a los teclados y por momentos, también a la guitarra de Dean Fertita. En definitiva, un elenco de excepcionales músicos, que han conseguido acuñar un sonido propio, elegante, cañero, bailable y muy reconocible, como suele estar al alcance de unos sólo unos pocos privilegiados. Si a todo esto, añadimos, la manera tan personal, a la vez que va modulando según le pide la canción, la forma del timbre y color de la voz, a la hora de cantar Josh Homme, tenemos como resultado a una de esas formaciones que no sólo marcaron una tendencia o época, sino están llamados a ocupar un lugar de honor, entre las más grandes leyendas del Rock de todos los tiempos.

Para la siguiente tanda y descargas de temas, estaría basada en el primer y tercer disco de la trilogía de Matador Records, con temas como 'My God Is the Sun' del disco '...Like Clockwork' o el tema 'Emotion Sickness' del reciente 'In Times New Roman...'. Entre medias, meterían el también muy reconocible temazo 'Burn the Witch' del álbum 'Lullabies to Paralyze'. En ese momento, y ante un ambiente tan positivamente caldeado y festivo, en unas temperaturas más altas de lo que veníamos soportando en las últimas semanas, sólo refrescadas por la brisa marina cercana y ganas de divertirse de la peña, regadas por cervezas y demás bebidas 'imaginables' espirituosas. Josh Homme se sentía tan bien sobre el escenario y el ambiente que se respiraba, que incluso habló de venirse a vivir a la zona, porque para él España es el mejor sitio del mundo para hacerlo.

El bloque de temas que se irían sucediendo a continuación, irían en una tónica similar y con especial relevancia al último lanzamiento hasta la fecha y de título 'In Times New Roman...' (2023), algunos de estos temas serían: 'Time & Place', 'Carnavoyeur' y 'Negative Space', entre los que se iban intercalando temas muy asentados entre los más fans de la banda en su disco del 2013, '...Like Clockwork': con temas como: 'If I Had a Tail' o 'I Sat by the Ocean'. No faltó otro clásico, a estas alturas, de la banda californiana, como 'The Sky Is Fallin' de 'Songs for the Deaf' (2002). Hablando de hits de la banda norteamericana, se reservaron para el final del grueso del listado de temas, dos éxitos muy notables que fueron muy coreados por los asistentes extraídos de su álbum 'Era Vulgaris' (2007): 'Sick, Sick, Sick', muy oscura y que podría entrar en el espectro del Noise Rock y Post-Punk; mientras, 'Make It Wit Chu' algó más versátil y en una línea mucho más sensual y con mucho Funk, que sólo QOTSA podrían haber acertado a acuñar, muy marca de la casa.

Dejando como broche de oro y colofón final para los bises el tema 'Long Slow Goodbye', que también han llegado a tocar Eagles Of Death Metal, desde hace un tiempo, otro proyecto musical en el que participa el siempre prolífico Josh Homme y otros dos de sus mejores y más reconocidos temas con Queens, en su amplia carrera, como serían 'No ones knows' y 'A song for the Dead'. Un final apoteósico en un marco excepcional, como deberían ser todos los conciertos o festivales. Ganas de diversión por y para el R&R, en muchas de sus facetas o variantes y amables propuestas de fusión más reconocidas, 'Rock and Roll toda la noche y fiesta durante todos los días'.

Texto: Obstinato y Fotos: Neave Visual Art para La Factoría del Ritmo.

Reportaje publicado en La Factoría del Ritmo, pincha aquí.
Galería fotográfica, publicada en La Factoría del Ritmo, pincha aquí.
Artículo relativo a la gira española de QOTSA, publicado en La Factoría del Ritmo, pincha aquí.